Los profesores somos seres humanos sujetos a las equivocaciones, reconocer que sin querer o de manera inconsciente estigmatizamos a los estudiantes sobresalientes no nos convierte en malos docentes.
Un día de estos me encontré con un escrito en el muro de un Facebook educativo me llamó poderosamente la atención, quiero que ustedes lo lean y lo valoren.
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"Posiblemente se considerará como un problema menor entre los tantos que afectan a la educación actual, pero tiene el mérito de graficar con claridad ciertas concepciones vigentes en los ámbitos escolares.
La "estigmatización de los alumnos estudiosos” por parte de sus compañeros revela cierta preocupante escala de valores y es, además, causa frecuente de bullying.
Los "traga”, como se los ha mencionado históricamente, o "nerds”, como se los llama con más frecuencia en la actualidad, son objetos de burla y acoso, por lo que debe inferirse que para la mayoría de los estudiantes el esfuerzo, la aplicación y las ganas de aprender constituyen características que deben evitarse.
Años atrás, el alumno sobresaliente solía ser también objeto de algunas burlas, pero en última instancia había, aunque costaba confesarlo públicamente, cierta admiración por su capacidad intelectual o por su constancia y esfuerzo. Pero hoy suele ser más duramente discriminado, sobre todo si la aplicación del estudioso es un obstáculo para su vida social, su relacionamiento con el sexo opuesto o la práctica de las disciplinas deportivas.
El término "nerds” es un anglicismo, que apareció por primera vez en el año 1950 en el libro "If I Ran the Zoo”, de Theodor Seuss Geisel, en el que se describía a un personaje que vivía dentro de un televisor. Un nerd es una persona inteligente, muy centrada y dedicada a un tema específico.
Figuras emblemáticas a nivel internacional, incluso propuestos como modelos exitosos a seguir, se autocalificaron como "nerds”, tales los casos de Steven Spielberg, Bill Gates o Mark Zuckerberg (el creador de Facebook).
En realidad, quizás el modelo a seguir sea, en el ámbito educativo, el del alumno que se caracteriza por la responsabilidad y la constancia en el estudio, pero también por la preocupación por el desarrollo de sus condiciones físicas y deportivas, y capaz de interactuar socialmente en armonía con el resto de sus pares.
Es decir, el que procura un crecimiento equilibrado de sus aptitudes.
Deber inexcusable de la educación –tanto la que se dicta en los colegios como la que se brinda en el seno familiar- es restablecer la lógica, puesta patas arriba, de la escala de valores. La perseverancia en los estudios y los esfuerzos en la adaptación al contexto social de los alumnos debe premiarse y exhibirse como un ejemplo.
Resulta incomprensible que aquel que se destaca en su rol de estudiante sea señalado como un "bicho raro”, y objeto de burlas sistemáticas por quienes se dicen sus compañeros."
¿Estamos listos los profesores para tratar con niños excepcionales, o nos encontramos igual que con niños con discapacidad?, salimos de la universidad o centros de formación para atender a la "normalidad" a la "regularidad", el resto se escapan de nuestras planificaciones.
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