Tengo solo 33 años, pero tengo vivencias como una mujer de sesenta, le doy gracias a Dios por permitirme conocer tanta gente, unas màs agradables que otras.
Unos causan màs decepciòn y en lugar de ser el apoyo o compañero idoneo son NADA, sensaciòn de abandono, vacio y ganas de no seguir... en fin la vida es asi.
Y se ha vuelto costumbre encontrarme gente asi, como si buscara que llegaran a mì.
Que rico es vivir!! aunque algunas situaciones sean por demas insoportables.
El trabajo en equipo es vital
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